Emprender: caminante, no hay camino…

Gemma Muñoz (@sorprendida), CEO de El Arte de Medir, es diplomada en informática y tiene un master en Web Analytics por la Universidad British Columbia. Su blog "Donde está Avinash cuando se le necesita" es uno de los más importantes a nivel internacional sobre medición online. Ha sido nombrada en octubre 2012 como una de las 100 Mujeres Líderes en España en la categoría de Emprendedoras e Innovadoras por Mujeres&Cia. Co-Autora de los libros "Marketing Analytics", “Analítica Web en una Semana”, “El Arte de Medir”  y “Métricas del Marketing”.

Directora del primer máster español en Analítica Web en Kschool. Forma parte de las Madrid Geek Girls (http://www.madridgeekgirls.es/) donde un grupo de mujeres comparten experiencia y conocimiento a través de encuentros que ellas mismas organizan sobre cuestiones relacionadas con la tecnología, marketing y entornos digitales.

... Se hace camino al andar

Lo que me decidió a emprender fue mi ansia de crecer profesionalmente. Si me quedaba en una empresa siempre vería el mismo tipo de usuarios, venía de un banco, luego fui a un ecommerce de antivirus... ¿y no iba a poder medir a los usuarios de viajes? ¿a los usuarios de contenidos?

Emprender y asesorar a diferentes empresas con diferentes objetivos y estrategias era la única forma de ampliar mi círculo de medición. Por eso creo que he tenido muy buena suerte, porque en estos años he podido estudiar muy diversos negocios y esto es lo que me ha permitido avanzar en mi disciplina.

Emprender es duro, día tras día, pero es muy gratificante. No soy muy de dar consejos porque creo que todos debemos encontrar nuestro camino y los tropiezos al final puede que no lo sean tanto con el paso del tiempo, y sean los que realmente te empuje a llegar a cumplir tus objetivos.

Lo peor siempre ha sido la burocracia, tanto a la hora de crear mi empresa como a la hora de cobrar las facturas... hasta que no pasa un año más o menos no tienes el suficiente cashflow para poder estar tranquila. Empiezas un proyecto y pasa tiempo hasta que lo facturas, y más tiempo hasta que lo cobras... pero tienes que estar al día de impuestos, pagar a tu gente, etc... Cuando empiezas de cero es lo primero que te quita el sueño, pero cuando ves que paso a paso todo va encajando te das cuenta de que todo es cuestión de tiempo.

También es un aprendizaje de gestión del tiempo. Emprender siendo madre de dos pequeñajos no es fácil ni en tiempo ni en forma, pero también he podido dedicarles tiempo de calidad y al estar feliz les transmito eso, felicidad. Y es lo más importante. El cashflow, la gestión del tiempo y el equilibrio familiar/profesional.

Me ha ayudado mucho el rodearme de gente en mi empresa con mis mismos valores y sueños, el caminar acompañada también es un gran aprendizaje. Se llega más lejos.

La idea era que todo el círculo se alimentara desde distintos puntos. Hay que tener en cuenta que yo no puedo comercialmente ir a buscar clientes a puerta fría. La analítica web es una auditoría de cómo se están tomando decisiones en internet, a nivel inversión de recursos y publicidad, comunicación, entorno en la propia web o apps, el trato a clientes, etc... Por lo que el cliente debe sentir la necesidad de tener información fidedigna al respecto, no se la podemos imponer.

Así que además de montar la empresa debía formar analistas mediante el master en analítica web que dirijo, debía dar conferencias sobre el tema y que la gente le perdiera el miedo a los números y la estadística, por eso empecé a viajar a distintos lugares y distintos foros para evangelizar sobre la disciplina.

En un par de años me llamaron de Google para nombrarme una de las embajadoras de la analítica digital en España junto a la compañía canadiense Cardinal Path. Además alimentaba nuevo contenido en la materia desde mi blog, lo difundía via twitter donde cada vez tenía más seguidores interesados en la materia y seguía leyendo, yendo a eventos, hablando con profesionales internacionales, para al final avanzar en conocimiento tanto mío interno como hacia el exterior.

Las nuevas tecnologías me han ayudado, han sido determinantes para que la analítica digital se convirtiera en pieza clave en la estrategia online de las empresas, y me han resultado de vital importancia para poder tanto avanzar en conocimiento interno como para transmitirlo de forma ágil y sólida.

Basar en las nuevas tecnologías la gestión tanto de proyectos como de personas, como de tratamiento de la información y transmisión del conocimiento es de vital importancia para poder sacar el máximo partido a tu trabajo ¡Y lo que nos queda por aprender y cambiar!

De lo que me siento más orgullosa como emprendedora es de seguir con la misma ilusión que desde el primer minuto. Porque al final todo es relativo, lo que crees que son éxitos vistos en la distancia no destacan tanto y los fracasos tampoco, así que he aprendido a relativizarlo todo y supongo que eso es lo que hace que no se acabe aún la magia de emprender.

También tiene que ver que me gusta ir creciendo profesionalmente, tengo la suerte de haber participado en proyectos muy diferentes y que me han permitido avanzar, probar todo lo nuevo que ha ido saliendo en estos años y al final me doy cuenta de que lo que soy hoy no tiene mucho que ver con lo que era cuando empecé. Creo que ese es mi mejor logro; haber evolucionado y seguir haciéndolo cada día.

Porque hay una gran diferencia entre conocer el camino y recorrerlo. Creo que a día de hoy no hay mejor profesor que la experiencia, por lo menos en internet.

Podemos leer libros, whitepapers, hacer masters, apuntarnos a blogs, etc... si no somos capaces de meter las manos en el barro para aprender de verdad, internet no es ni será nuestro mundo.

Lo que yo hacía hace 10 años no se parece en nada a lo que hago ahora, por la propia tecnología y por el momento de madurez de las empresas. Por eso es tan importante el estar al día de todo lo nuevo, lo que mejora lo que conocemos etc... pero también el ponerlo en práctica.

Recorrer el camino es lo que nos permite ir escribiendo la historia, crecer profesionalmente, pasito a pasito. Es bueno conocer el camino, pero la intensidad viene al recorrerlo.

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